Aprenda a estacionar

Hoy fui a subir al auto y vi un papelito enganchado en la ranura de la puerta. Pensé que era el humillante de siempre («COMPRO SU AUTO EN CUALQUIER ESTADO»), pero no. Con imprenta mayúscula y birome azul, decía: «APRENDA A MANEJAR. LOS DEMÁS TAMBIÉN NECESITAMOS ESTACIONAR».Lo giré, pero no decía nada más: del reverso, en tinta negra, la gitana Sandra ofrecía un servicio de … Continúa leyendo Aprenda a estacionar

A propósito de la terapia online

Ayer decidí que nunca más voy a tener terapia por videollamada. No voy a volver a llamar a Vanina para tratar mi neurosis. Si alguna vez lee esto, a lo mejor entenderá por qué.De la interminable lista de cosas horrendas que nos dejó hasta ahora la pandemia, como hacer colas de cincuenta metros para comprar una banana o coger con el codo, creo que las … Continúa leyendo A propósito de la terapia online

Una cena navideña

Hoy mi novia me agarró desprevenido. Me acorraló sin vueltas, cuando apenas nos despertamos:—Tenemos que definir a dónde pasamos las fiestas.Ahí supe que íbamos a discutir todo el día.Maldita pandemia. Me hizo olvidar por completo la planificación de esta charla. Intenté usar el jet lag de la tragedia planetaria a mi favor.—¿Eh? Estamos en marzo.—Hoy es 15 de diciembre.—¿Segura?— fruncí los ojos, mientras fingía chequearlo … Continúa leyendo Una cena navideña

Estimada ^CC

Estimada ^CC. Si obra el milagro de Twitter y esto llega a tus manos, por favor escribime. Mandame un mensaje directo, como solías hacer. Y continuamos por ahí. Soy yo: el titular de la línea finalizada en 5750.No voy a mencionar a tu compañía. Me cansé de dar explicaciones. ¿Tan difícil es que vuelvas a atenderme vos? ¿No se solucionará apagando y prendiendo Twitter o … Continúa leyendo Estimada ^CC

No diálogos con Eduardo, mi taxista frecuente

Eduardo tiene 53 años. Desde diciembre pasado, maneja un taxi en Buenos Aires, por primera vez en su vida. Antes tuvo alguna breve experiencia como remisero, “pero, Federico -me dice siempre-, hace pila de años, pila de años”.Eduardo, antes, era gastronómico. Atendía un pool en Flores, un barcito propiedad de Don Goyo, un español que ya debe andar, Federico, por los noventa, noventa y dos … Continúa leyendo No diálogos con Eduardo, mi taxista frecuente